Hoy es mi alma un campo arado
donde los “espurgagüeyes” esculcan los gusanos de la tristeza
para matar tu ausencia.
Ahítos, no levantarán el vuelo,
tal como mi dolor, a ras del suelo que te cubre.
Arada la pena, abierto el surco para la siembra,
en estas manos que ya no te tocan,
acaricio la semilla huera de tu risa,
y no da más fruto que el silencio.
Suplanto al aguacero con el llanto,
Tantas preguntas sin respuestas
horadando en circular agonía el barranco de mi cabeza.
Tu muerte, pedregal que destroza la azada de mi lengua
para no poder llamarte, amigo del alma,
a voces, a veces.
9 comentarios:
A veces, muchas veces.
Abrazos.
Suplanto al aguacero con el llanto,
Tantas preguntas sin respuestas
PRECIOSO ME QUEDO CON ESTO
SALUDOS
Rosa un poema muy hermoso, triste pero muy hermoso.
Un abrazo.
Amiga Rosa. cuando a tus poemas volverá la sonrisa?.
Deja que tus particulares e intransferibles "espurgagüeyes", levanten su vuelo alto, muy alto, para que luego no sepan volver.
Llámame siempre a voces y nunca a veces, núnca a veces.
Bonito poema éste, lastima de la tristeza que lo acompaña.
Un beso.
J. F.
El poema es el reflejo del alma, el poeta transmite lo que siente en ese momento y tus versos reflejan una alta sensibilidad, eso es lo importante.
Un beso, Rosa
Se van, querida, se van sin pedir permiso...
Triste es el día por estos lares también. La algarabía de los niños diluye la tristeza.
Besito.
Bonita inspiración. Felices Fiestas.
Me gusta esa alma como campo arado... a voces...
Un abrazo
Edith
Esconde mucha tristeza y que bonitas palabras elegiste para expresarla.
Besos
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