Pájaros torpes cruzan el invierno hasta otros brazos,
nidos trenzados de palabras acurrucan el canto,
ensayan
caricias con la complicidad del
viento,
gritan la urgencia de saberse libres
ajenos al tumulto de los trigales,
pactando una tregua en la molienda.
Quizás la lluvia apague el sueño
de la zarza que arde en mis pupilas,
y me despierten los últimos trinos de tu risa
antes que me cosan el entendimiento
con el hilo invisible del
olvido.
4 comentarios:
...Quizás la lluvia apague el sueño
de la zarza que arde en mis pupilas,
y me despierten los últimos trinos de tu risa
antes que me cosan el entendimiento
con el hilo invisible del olvido.
QUE SE PUEDE DECIR DESPUÉS DE ESTO...
Los pespuntes, personalmente, los quiero con hilo bien visible, brillante... No quiero olvidar nada, ni a nadie.
Un besito y tu café volátil.
Belleza en estado puro Rosa. Que los hilos se han visibles, muy visibles. para que no nos lleve el olvido.
Besos.
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