El silencio
de repente llama a mi ventana. Trae el rumor de todos los mares que aún no he
visto y el lastre de las palabras escritas en la bitácora del tiempo…
Hay un silencio
que me sube por la espalda recordando la caricia primera, pleamar de adolescencia.
Otros
silencios llegaron más tarde sembrando preguntas en las grietas del amor roto.
El silencio
se hizo eco en mi casa y en mis poemas viejos, se expandió como una tormenta
abocándonos al naufragio.
Con la vida
hecha girones, grité, grité, grité para desahuciar al silencio…
Por fin, hoy,
desde todos mis rincones se oye cantar al mar.
18 comentarios:
Me alegra que así sea, el silencio es bueno cuando es refugio buscado, pero cuando permite, luego del cobijo, salir a disfrutar libre y plenamente.
Un abrazo
has roto tu silencio con estas palabras Rosa...
Ese tipo de silencio es como para desterrarlo, es bueno escuchar como brama el mar. Bello Rosa.
Un abrazo.
...y yo que conozco esto, tú lo sabes amiga. Creo que nos debemos una reunión sevillana en breve, para montar mucho ruido :)))
Besos!!
Y por fin gritaste, y rompiste ese silencio que tanto duele, que tanto nos afecta.
Hermoso texto lleno de sentimientos que se entrecruzan.
Un beso!
Has retratado perfectamente los silencios en cada una de las etapas de la vida. Me ha gustado mucho.
Echar los silencios que desgarran, buena cosa esa y si es con el rumor del mar mejor que mejor que el agua saladita cura y sana, jejeje, de eso se yo mucho!, a veces solo es dejarla salir por las pestañas y dar la vuelta y recomenzar... que me gusta leerte mi querida amiga y sabes????, no te tenía en los blog que sigo!!! imperdonable, pero que clase de neurona tengo???, ais madre, solucionado, ya te llevo en el ladito, miles de besosssssss
Sabía yo que al entrar a tu blog encontraría algo así. ¡Que arte tienes, hija! Besos.
preciosa tu prosa.
Esos silencios a veces queridos, a veces obligados, muy bien plasmado en tus bellas letras.
Un abrazo
Si el silencio nos ahoga hay que gritar y espantarlo.
Magistral Rosa.
Un beso.
He leído una primera vez sin pensar y otras ya con el click del entendimiento abierto. Disfruté tu texto por la mera musicalidad y volví a disfrutarlo comprendiendo causas y consecuencias.
Estupendo, amiga.
Un abrazo asiiií de fuerte.
Fue como una pesadilla, donde el silencio ahoga hasta que el mar te libera. Me ha gustado mucho Rosa, cómo has expresado el silencio, cómo lo has sentido y como lo has transmitido. Enhorabuena. Besos y buen fin de semana.
Twitter: @Pepe_Lasala
Silencios que devuelven la vida en forma de sensaciones. Evocaciones que se materializan e inundan un presente callado por rubor.
Besos
Decirte que escribes bellísimo, ya es caer en la redundancia. Pero ciertamente así es. Hilaste silencios con palabras. Desde acá se puede sentir.
Besos!
Gaby*
Desde el silencio escuchar de nuevo esa voz del amor es lo más. Bellísima letras. Un beso
Cuando el silencio llama a la ventana a hay que abrirle la puerta. pero siempre vigilarlo para que no se quede a perpetuidad.
Es bueno escuchar los lloros y las risas de un bebé, el viento que mueve los árboles, y el ruido de las olas del mar.
Saludos muy cordiales.
Cuando el silencio equivale a incomunicación, a muros no deseados que se levantan, duele, oprime, desgarra. Ese silencio, paradógicamente, crea un estruendo interior que nos asfixia al que es necesario darle salida, crear una válvula de escape que aligere la presión, gritar para desahuciarlo.
Me alegro de que en tu orilla se oiga el cantar de todos los mares.
Un fuerte abrazo, Rosa.
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