Arrítmica, suena una gotera en el cubo de latón. Escribo en el vaho de los cristales: Septiembre.
En mi cocina huele a membrillos dulces, el reloj tiene un año de retraso, los gorriones se refugian de la tormenta en el alero del tejado, el vecino del segundo grita lo acostumbrado, tu recuerdo llueve fuera... Septiembre, septiembre.
Lloran los niños en su primer día de colegio, huelen a colonia fresca, a goma de borrar, a lapicitos de colores, lloran todos los miedos juntos esperando al arco íris. Los perros callejeros se hermanan con el barro, en la esquina alumbra la farola rota, el cubo de la basura tiene cuatro dueños...
Septiembre, septiembre, septiembre
No me abrocha el vestido de los domingos, el humo del cigarro me desdibuja la sonrisa, los zapatos de tacón son el último paso hacia el fracaso, tengo un novio cyber, una carrera en las medias, una pregunta sin respuesta, una luna al fondo del pozo, un poema endecasílabo, un perro, ningún futuro...
Septiembre, septiembre, septiembre, septiembre...
La radio grita en francés, el otoño tiene prisa, escribo del revés tu nombre para entenderte, las palabras se esconden en el dobladillo de la alegría, las hojas de mi diario juegan a las cuatro esquinas, pronto, la higuera desnudará sus ramas grises, borro los garabatos de humo que deja la duda en mis pupilas.
Quiéreme al menos hasta que acabe septiembre, septiembre, septiembre, septiembre, septiembre...
14 comentarios:
Ayyyy, pero como huele a septiembre tu prosa, tus versos y tus rosas de otoño.
Me he quedado prendada en algún reglón, y seguro tengo que esperar a arrancar la hoja del calendario para olvidarlo.
Un beso
Me ha gustado mucho tu septiembre, tus posesiones y sentimientos, tus deseos y tus descripciones, te leo y pienso lo mucho que me hubiera gustado ser capaz de escribir algo tan bueno. Saltos y brincos
Dice Encarni que se ha quedado prendada en algún renglón, y yo te digo que estoy prendada de ti desde que leí tus primeras letras. Eres la escritora que yo quisiera ser.
Un beso y me quedo releyendo de nuevo tus palabras.
Hola Rosa: Creo que te dije un dia que desastre nada. Ni las mínimas trazas. Que eres una escritora,como la copa de un pino, esto lo saben hasta los pajarillos, que se refugian en el alero de tu tejado. Y lo sabran pronto esos niños que lloriquean al volver a la escuela. Un beso muy grande y un ruego. por favor prodÍgrate mas a menudo.
Es cierto que el otoño tiene prisa por entrar, rosa, cómo me ha gustado tu texto sobre el otoño, qué bonito me ha sabido tu septiembre.
Un besazo.
Un calendario inquieto que amenaza con correr sin miramientos, dejándonos afuera de todo lo que aún sonamos con ansias! Un texto hermoso, marcado por la nostalgia y la poesía.
Un abrazo
Buenísimo. Y tiene una enorme fuerza para escucharlo, me lo he imaginado esuchándolo de tu voz. Como siempre me has sugerido muchas imágenes, ideas...
Muchos besos.
Copio tu relato y lo pego en una página de Word, para tenerlo a mano y leerlo muchas veces.
Sinceramente me ha impresionado la belleza de tu texto. Mucho sentimiento, mucha poesía y mucha verdad en tus palabras.
Enhorabuena.
Un beso.
Me ha transmitido mucha melancolía, tristeza y añoranza tu relato, justo el mismo efecto que me produce este mes...
Tiene un ritmo poético que como dice Juan Carlos debe ser una delicia escucharlo.
Un beso
Que maravilla!! hay un aire de otoño, melancolía y desamor que acecha a la protagonista de tus versos, pero lejos de la lástima, inspira ternura,.. dulce esperanzada!
Hermosas letras Rosa!
Abrazo
Muchos sentimientos encontrados en ese mes de septiembre que describes.
Un abrazo
Un mundo de diferentes sensaciones en ese Septiembre que cíclicamente repites en una progresiva secuencia de Septiembres. Hermosa entrada, Rosa.
Un fuerte abrazo.
Tal como has descrito al mes de Septiembre, cualquiera que no lo conozca, lo conocerá perfectamente.
Aqui va mi relato de la tempestad http://javiermiro2.blogspot.com.au/2016/09/la-tempestad.html
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