Dolores tenía dos trenzas rubias, unos ojos de miel, un silencio perpetuo, un abrigo rosa de
paño, muchos primos, gatos sueltos, cien olivos, una hermana, un huerto…
Dolores me tenía a mí, pegada al vaho de los cristales,
acurrucada bajo su manta, compartiendo
la lumbre, el pan con chocolate, el jarabe de la tos, las regañinas de
su madre, los lapicitos de colores, las canciones de Lou Reed, los primeros
zapatos de tacón, la seda con que bordábamos las horas, las tardes en las que
el sol jugaba a esconderse en la azotea…
Dolores está a la
sombra de mis mejores y en mis peores momentos, bebimos del mismo vaso la vida,
cumplimos hasta cincuenta y ocho,
hablamos lo justo y soñamos lo que la vida nos deja.
Ya no compartimos las tardes de domingo ni el cigarro a
medias, ahora nos sobran kilos y experiencia, ya no nos llega la risa para
llenar los bolsillos, pero aún podemos espantar con una mueca, la tristeza por
todo lo que perdimos.
Somos huérfanas de muchas cosas, las que nos hemos contado y
las que no, nos separan caminos sin importancia que se borran apenas nos damos
un abrazo en esos días en los que a las dos nos puede la nostalgia y volvemos a ser Dolorina
y Rosa Mari… amigas, hermanas del
alma.
14 comentarios:
Rosa compartir de esta manera es muy hermoso, mantener una amistad toda una vida una proeza.Por que podias seguir durante muchos años así.
Que bonito lo has contado.
Muchas gracias por estar este jueves aquí.
Un abrazo.
Conozco esa amistad eterna que desde pequeñas va haciendo cada vez mas grande y mas fuerte. Es muy bello.
Felices navidades que te llenen de paz y felicidad
Mil besos
Isa
Que bella amistad os une.
Es preciosa esta entrada.
una lluvia de besos
Me descubro ante esta entrada, que tan brillantemente y con tanta calidad literaria, nos ha mostrado el secreto vivo de una gran amistad.
Gracias y un abrazo.
Una bonita y sincera amistad que, tal y cómo deber ser, perdura con el paso de los años. Gracias por compartir con nosotros este texto y también las fotos que nos haces ponerle cara a Dolores. Besos.
Preciosa esa amistad que perdura en el tiempo.
Un abrazo
Eso es precioso Rosa, desde niñas esa amistad. Es algo maravilloso. Muy bien escrito amiga. Desde el blog de la Tertulia Cofrade Cruz Arbórea te deseamos de corazón Feliz Navidad y próspero Año Nuevo. Un fuerte abrazo.
@Pepe_Lasala
Que precioso relato, pero ante todo, que preciosa historia de vida! Un gusto conocer a Dolores, la sentí como esa amiga hermana que desde la más temprana infancia me tomó de la mano para jugar y terminamos haciendo camino juntas. Qué haríamos sin un alma incondicional que nos acompañe?
Un beso enorme para ambas!
Gaby*
Que lindo es tener ese tipo de amistad, así desde pequeñas y crecer unidas
Un recordatorio lleno de matices y momentos que nos identifican a muchos, (supongo) En cualquier caso siempre queda ese abrazo que dice sin hablar.
Besos
Me ha conmovido tu hitoria, me han enternecido esas dos pequeñas, me han dado sana envidia esas dos hermosas compinches que hoy peinan canas pero sienten frescos los lazos sinceros que las unen desde entonces.
=)
qué bueno contar en el haber, con amigas así....
Como se dice por ahí, hay tantos tipos de amigos y estos que compartieron nuestra infancia y adolescencia son como el primer amor, jamás se olvidan y siempre se vuelve a ellos....
Hermoso y emotivo Rosa, como es tu corazón.
Un gran abrazo y felíz Navidad!
Loa amigos de infancia suelen ser volubles y poco duraderos,pero cuando superan esa fase, se presentan como los más firmes y sólidos sin importar el tiempo o la distancia. Como la preciosa historia de esas dos amigas que ya peinan alguna que otra cana.
Un fuerte abrazo, Rosa y Feliz Navidad.
Rosa desde aqui te deseo mucha felicidad en estos días, bueno en estos y en todos los que aún nos quedan por vivir.
Un abrazo enorme y Feliz Navidad.
Publicar un comentario