lunes, 31 de agosto de 2015

El emigrante



Este relato, "El emigrante" ha quedado finalista en el certamen del Valle de Alcudia.

“Los años nos separan de las raíces pero siempre se añora el tronco a donde volver a recostar los sueños”. 
Amanece en este agosto. Todo va a cumplirse.
Sólo le separan trescientos  kilómetros de Fuencaliente.
Las calles suben y bajan jugando con el sol y las sombras. Empinadas cuestas
le llevan hasta la plaza.
Piensa que si le confunden con un forastero, igual lo tiran al pilar de los burros, y una sonrisa le cose las arrugas.
Dos perros callejeros le siguen de cerca.
Hay cosas que no han cambiado, las mujeres que baldean las puertas de las casas antes de que el calor apriete, los hombres en la taberna beben aguardiente y discuten por cosas sin importancia con el acento particular de su idioma, el cucón.
Al viejo Manuel se le eterniza la mirada en cada callejuela, en cada fuente, en cada amigo.
La Tata Manuela, centenaria ya,  lleva puesto el vestido de los domingos y jazmines  en su pelo. Se ha puesto guapa para recibir a Manuel.
Parece que fue ayer cuando, con una maleta de cartón y un hatillo al hombro, lo vio alejarse del pueblo por el camino de Torreparda.
Hoy se cumple esa eterna petición a la vida: volver a sus raíces, al cortijo cerca de las Lastras, dónde los chiquillos iban a refrescarse  en verano.
El abuelo desanda un camino de casi cincuenta años.
Por fin la  luz de Sierra Madrona lo acoge.
Ya puede morir tranquilo.




7 comentarios:

Leonor dijo...

Una preciosidad como todo lo que escribes. Tus palabras llegan al alma.
Merecido premio. Muchas felicidades.

Un abrazo.

Ester dijo...

Así ha sucedido tantas veces, pero se ha explicado tan bien muy pocas. Enhorabuena por llegar a finalista. Un abrazo

Amando García Nuño dijo...

Emotiva visión de un retorno que simboliza, como no puede ser menos, todos los retornos.
Abrazos, siempre

Manuel Lorenzo Abdala dijo...

Rosa, Rosa desastre (nunca he comprendido del todo el por qué “desastre” a continuación de tu nombre, si más bien eriges cual arquitecto experimentado y proyectas suerte, fortuna y victoria, pero en fin, el mar... Así sois los poetas antojadizos simbólicos)
La poesía es metáfora tenaz, se impone por sobre todas las cosas, y la tuya va directa a la aorta (dicen que los toreros temen tus cornadas y yo ahora los comprendo). Tu relato "EL EMIGRANTE" es de esos textos que por más que uno quiera, no puede, por cualquier imperativo, mirar de soslayo, mucho menos dar la espalda. Toca, punza, hiere, mata (poéticamente hablando).
No sé si te habrás dado cuenta, pero has creado una obra de arte. “EL EMIGRANTE” es de esos escritos que deberían grabarse hasta en las piedras de los caminos, todos.
Me veo en la obligación de compartirlo en facebook, con tu permiso o sin él. (Tú eres poeta y comprenderás mis motivos)
Felicidades, artista.
Un abrazo.
Manu

Juan Carlos Celorio dijo...

Caramba Rosa, es precioso. Has creado un relato que contiene mucho sentimiento, es un relato alegre que no esconde la tristeza que destila una vida tan dura.
Un cariñoso abrazo.

AdolfO ReltiH dijo...

UN RELATO QUE CONMUEVE.
ABRAZOS

CARMEN ANDÚJAR dijo...

Precioso Rosa. Cumplió el sueño de muchos emigrantes, morirse en su tierra.
Un abrazo