sábado, 27 de junio de 2009

Sabados literarios de Mercedes "Diario intimo de una nevera"




Helaíta, así me tienen los visitantes de mis adentros.
Vacía a ratos, vacío que duele porque la luz rebota en mis costillas lanzando al estrellato a la única lata de mejillones en escabeche que me habita.
Yo no tengo nombre. Soy la costumbre, el trasto que ocupa media cocina, gorda por convicción y fría por defecto.
Blanca. A mi me gusta ser blanca y parcelada por dentro, dejando el corazón a un lado. A mi no se me permite ese gasto superfluo de acondicionar un habitáculo guarda-emociones.
Nadie entiende de eso… aquí sólo se guardan cosas que caducan.
Me mueven del uno al diez o del diez al uno sin previo aviso. He de adaptarme a los subidones cuando me atiborran, según el día, de verduras para el régimen, de chorizos para la barbacoa o de cervecitas para la final del partido.
Y es que a mi no me gusta la soledad del yogur de plátano, ni la mudez de las acelgas, ni la indiferencia de las ciruelas, los silencios del queso fresco, la callada comunista del Ketchup, los soliloquios del jamón cocido, la friolera Mirinda o la sorda manera de aplaudir de las chuletas.
Alegría, aunque tenga gastadas las bisagras, aunque en verano me explote “la patronal” yo quiero la alegría del agua helada en las gargantas y ser, en dos sacudidas, cubito de hielo y nadar en el tinto con gaseosa.
Alegría, que soy del sur por adopción aunque me fabricaron en Alemania.
Se que no soy el último modelo, que apenas abren mi puerta la compañía eléctrica aplaude sus dividendos, pero también se que me han tomado cariño y me condecoran con imanes para sujetar notitas que luego nadie lee.
Me quieren porque soy simple ( Y no como la lavadora, el horno, la vitrocerámica, la plancha, y hasta para colocar el rollo de papel de water que hay que estudiar latín, y si no que se lo pregunten a algunos)
Yo soy la nevera de la casa de los Núñez… y este es mi curriculum.

18 comentarios:

Anónimo dijo...

Buen curriculum tiene la nevera de los Nuñez, cuando ya no la ocupen quizás la contrate.

Esta lindo tu relato.

Saludos.

CASANDRA dijo...

Por lo que veo la heladera de los Nuñez, tiene buen curriculum y mejor suerte que otras, cuyo estado de abandono es evidente y van directo a las chatarrerías... pobres!!! Está bueno esto de darles vida y hablar por los objetos.
Un cariñoso saludo.

Trini Reina dijo...

A mi también me gustan las neveras blancas, pero por cuestiones que no vieien al caso, la que tengo ahora es gris metal y, no nos llevamos muy bien ella y yo, pero ella me dice: "afortunada eres con tenerme, y además gratis, así que a callar" y ahí estamos, ella y yo, soportándonos:):)

El curriculum de tu nevera, se me antoja feliz.

Saludos

MARU dijo...

Bueno, esta nevera cree en la predestinación!!!!
Y tiene baja la autoestima. Porque en ella se guardan cosas riquísimas....
Y sino, que pregunten a los peques!!!!
Un besito

chonoman dijo...

Yo quiero una nevera como la tuya, directa al grano sabe muy bien lo que es, pone cada cosa en su sitio y con su nombre.
Me ha gustado.
Besotes.
Paola.

Dorotea dijo...

Cuando la descartes, avísame. Quisiera tener una charla sobre la "callada comunista del Ketchup" y la "sorda manera de aplaudir de las chuletas".
¡Qué imaginativo!
Resulta que no hay dos neveras iguales; menos mal que las teñí todas diferentes.
Un beso.

Anónimo dijo...

Al menos esta nevera ha tenido buen trato, pero porque estará preparando su curriculum? :)
Un besito con notas!

CARMEN ANDÚJAR dijo...

Precioso relato, lleno de realismo y ternura. A veces las neveras como las personas han de aguantar cosas que no les gustan, porque en otro momento vendrán otras más deliciosas.
Un abrazo

XoseAntón dijo...

Optimismo y ganas de nadar en vino con gaseosa, ¿se puede pedir más? Si hasta la nevera, humilde, sencilla, fácil de querer, es feliz, ¿cómo no van a serlo los Núñez? No me extraño que la mimen, donde hay ganas de vivir, hasta el cariño cuesta menos.

Bikiños por tu refrescante y optimista relato.

Lupe dijo...

Los Núñez seguro que están orgullosos de esta nevera. Su curriculum es impecable.

Excelente relato, Rosa.No sabes lo que me alegra encontrarte.

Un abrazo.

Maat

Alfredo dijo...

Para tu tranquilidad, las neveras no son de donde nacen, sino de donde enfrían, así esta nevera sureña, alegre, positiva, entusiasta de la vida alimentaria, va a seguir regando las gargantas sedientas con agua helada, que levante los 40 grados a la sombra.

Muy buen relato con parrafadas antológicas, enhorabuena.

Besos

Anónimo dijo...

R0SA...DESASTRE DE R0SA¡¡¡
P0DRIA DECIR A M0D0 DE C0MENARI0 ES0 DE JA¡¡¡
Y ME QUEDARIA TAN ANCH0 Y TAN DE VERDAD...ME HA GUSTAD0 EL CURRICULUM, VAYA QUE SI ME HA GUSTAD0¡¡¡...LA F0RMA, ME HA ENCANTAD0. EL C0NTENID0...AY, EL C0NTENID0 ME HA SUBYUGAD0, ME HA ATAD0 A UNA S0NRISA¡¡¡
GRACIAS, CARMEN...DESASTRE DE CARMEN.

Anónimo dijo...

entr0 c0n la s0nrisa puesta...vuelv0 riend0me de mi¡¡¡¡ 0sea, te llam0 carmen, desatre...y v0y c0n l0s d0s bu¡ien puest0s y n0 me refier0 a mi c0m0 dessastre?? di0s mi0, si acab0 d ep0ner tu n0mbre y al final te llam0 carmennn...ay, el desastre, r0sa l0 s0y y00000¡¡¡
gracias y subsanad0 el desastre...

yonky dijo...

muy ocurrente tu prosa,me agrada tu heladera,es muy personal,con caracter,con estampa definida y asumida,maravilloso,por favor no le des de baja al primer desperfecto,no se lo merece.

cariños,buen relato

mardelibertad dijo...

La nevera se debe cuidar y buen currilulumçBesos

Ana Villalobos Carballo dijo...

Querida, Rosa, no sé en qué consisten estos sábados de Mercedes pero desde luego que hacen que saques toda tu imaginación a la palestra. ¡Menudo alboroto de nevera! jajja, Me ha encantado.


Un beso que te llegue al corazón

Ana

M.A dijo...

Un currículum perfecto.
Me ha parecido genial una de las partes de su exposición donde la nevera va sustantivando sus disgustos:
"Y es que a mi no me gusta la soledad del yogur de plátano, ni la mudez de las acelgas, ni la indiferencia de las ciruelas, los silencios del queso fresco, la callada comunista del Ketchup, los soliloquios del jamón cocido, la friolera Mirinda o la sorda manera de aplaudir de las chuletas"

Anónimo dijo...

¡Buen curriculum y buen relato! Me lo he pasado pero que muy bien.
Un saludo afectuosìsimo, caramba,

Tèsalo