lunes, 7 de abril de 2008


A veces me pregunto a que sabe la ceguera absoluta de tu tacto,

Cómo anidará en mí, el pájaro azul de tu mirada

De que aromas va envuelta tu piel de distancias.

A veces me pregunto de qué ser, mientras te espero,

De miel o candela.

Si sabré saciar tu sed cuándo naufragues en mi cuerpo.

Si nos cabrá todo el mar en el hueco del deseo

Si seremos uno en la multitud del otro

Me pregunto

-el NUNCA es el adverbio de tiempo que más me aterra-

2 comentarios:

Ático dijo...

El nunca no se quiere con las dudas de la piel.
Felicidades por tu nuevo rincón.

Mauricio Feller dijo...

Será de piel y será de miel
Y creéme, no hay tantos océanos para llenar el hueco del deseo

Mauricio